Este fin de semana se llevó a cabo uno de los festivales más importantes de Estados Unidos. Se trata de Lollapalooza, que se realizó en Gran Park de la ciudad de Chicago.
El festival, que comenzó el jueves 28 de julio, tuvo entre sus headliners a Metallica, Dua Lipa, J. Cole, Green Day, Doja Cat, Machine Gun Kelly, Lil Baby y Kygo. También contó con la presencia de: Charli XCX, Big Sean, Turnstile, King Princess, Denzel Curry, Caroline Polachek, Muna, 100 gecs, Rolling Blackouts Coastal Fever, Horsegirl, Wet Leg, Young Nudy, Midwxst, Jazmine Sullivan y muchos otros.
Dua Lipa se roba el show
La cantante albana fue la encargada de cerrar la segunda jornada del famoso festival. Y pese a que los fanáticos estaban expectantes de que Elton John se sumara a la cantante para juntos interpretar su éxito “Cold Heart” –cosa que no sucedió–, el show fue todo un éxito.
La cantante mostró todo su talento interpretando gran parte de su último álbum Future Nostalgia y deslumbró con su canto, baile y performance. Vestida con un enterito negro de Versace, Dua Lipa junto a sus bailarinas impresionaron a los espectadores.
Por otro lado, la Lipa recordó su show, en un escenario más pequeño, en 2017 en el festival. Pero también hubo espacio para política. Así, la cantante invitó a defender “los derechos de las mujeres y la comunidad LGBTQ” y a enfrentar “a la injusticia racial”.
Por otro lado, este domingo será Green Day el encargado de cerrar el festival y también se espera que sea un gran espectáculo.
GettyImages
GettyImages
Uno de los primeros en volver
Cabe recordar que Lollapalooza fue uno de los primeros festivales en volver luego de la pandemia. El año pasado, la ciudad de Chicago ofreció pases gratuitos de un día para Lollapalooza 2021 como incentivo para que los ciudadanos se vacunaran contra el covid-19.
El festival resultó ser un éxito en cuanto a la seguridad en medio de la pandemia, según el comisionado del Departamento de Salud Pública de la ciudad. Además revelaron que no había evidencia de que el festival estimado de 385,000 personas fuera un evento propagador. Tampoco se consideró que tuviera algún “impacto sustancial en la epidemiología de covid-19 de Chicago”