El 24 de octubre de 2011, Coldplay lanzó Mylo Xyloto, su quinto álbum de estudio, y marcó un punto de inflexión en su carrera.
El disco presentó una nueva estética visual y sonora que rompió con el estilo más orgánico de Viva la Vida or Death and All His Friends (2008).
Con canciones como Paradise, Every Teardrop Is a Waterfall y Charlie Brown, el grupo británico encabezó las listas de ventas en Reino Unido y Estados Unidos.
Fue la primera vez que Coldplay debutó directamente en el número uno del Billboard 200, un logro que consolidó su estatus global.
Éxitos globales y una nueva etapa sonora para Coldplay
Mylo Xyloto vendió más de 14 millones de copias en todo el mundo y recibió una recepción mayormente positiva por parte de la crítica. Aunque algunos medios señalaron un exceso de producción, la mayoría celebró su ambición y su fusión de géneros.
"Queríamos hacer algo colorido y vibrante, algo que se sintiera optimista", explicó Chris Martin sobre el enfoque del álbum, que mezcló guitarras con sintetizadores y ritmos electrónicos.
El primer single, Every Teardrop Is a Waterfall, lanzado en junio de 2011, alcanzó el puesto 14 del Billboard Hot 100.
Luego llegó Paradise, que escaló hasta el número uno en el Reino Unido y se convirtió en uno de los mayores himnos de la banda.
Charlie Brown y Princess of China -esta última con la participación de Rihanna- reforzaron su dominio en las listas internacionales.
La colaboración con Rihanna fue clave para que Coldplay explorara nuevos terrenos musicales.
"Fue una experiencia increíble. Ella llevó la canción a otro nivel", dijo Martin sobre el tema que incorporó tintes R&B y electrónicos.
El Mylo Xyloto Tour: color, energía y conexión global
El lanzamiento del disco dio inicio a una de las giras más espectaculares de la década. El Mylo Xyloto Tour comenzó el 26 de octubre de 2011 en Madrid y recorrió Europa, Asia, América del Norte y Oceanía.
Los conciertos se destacaron por sus efectos visuales, brazaletes luminosos y una puesta en escena inmersiva que convirtió cada show en una experiencia audiovisual.
La gira confirmó la capacidad del grupo para conectar con públicos masivos sin perder su esencia emocional.
