¿Alguna vez te has preguntado por qué algunos estudiantes prefieren estudiar con música de fondo mientras que otros prefieren el silencio absoluto?
La respuesta es más compleja de lo que parece y tiene una base científica sólida. Numerosos estudios han demostrado que la música puede ser una herramienta poderosa para mejorar la concentración y el rendimiento cognitivo.
¿Cómo funciona la música en el cerebro?
Cuando escuchamos música, nuestro cerebro se activa de diversas maneras.
Las melodías, ritmos y armonías estimulan diferentes áreas del cerebro, incluyendo aquellas relacionadas con la emoción, la memoria y la atención. Al escuchar música, nuestro cerebro libera dopamina, un neurotransmisor asociado con el placer y la recompensa, lo que puede mejorar nuestro estado de ánimo y aumentar nuestra motivación
Un informe de la Universidad Católica de La Plata, Argentina, señala que aprender a tocar un instrumento musical desde la infancia no solo mejora el rendimiento cognitivo, sino que también fortalece la estructura cerebral.
"Estudiar con música de fondo proporciona beneficios tangibles, ya que estimula áreas del lóbulo prefrontal relacionadas con la atención y la satisfacción", explica el estudio.
¿Qué tipo de música es mejor para concentrarse y estudiar?
- Música clásica: Con sus melodías suaves y estructuradas, la música clásica crea un ambiente tranquilo y propicio para el estudio. Compositores como Mozart, Bach y Beethoven son excelentes opciones para mejorar la concentración.
- Música ambiental: Este tipo de música se caracteriza por sus sonidos suaves y repetitivos, que crean una atmósfera relajante y propicia para la concentración. La música ambiental puede incluir sonidos de la naturaleza, como el sonido de las olas o el canto de los pájaros.
- Música instrumental sin letra: La música instrumental, como el jazz, el blues o la música new age, también puede ser muy eficaz para mejorar la concentración. Al no tener letras que distraigan, permite una mayor concentración en la tarea que se está realizando.
La música tiene el poder de activar áreas del cerebro que influyen en la concentración y el aprendizaje | Getty Images
La música como terapia para el bienestar
La psicóloga española Laura Herrero destaca que la música no solo mejora la concentración, sino que también tiene un impacto emocional positivo.
"La música nos permite sentir y compartir emociones, además de ser una vía de expresión de nuestro mundo interno", comenta. Según Herrero, escuchar canciones regularmente puede enviar señales positivas al cerebro, fortaleciendo la atención y promoviendo el bienestar general.
Claves para usar la música al estudiar
- Elige géneros instrumentales como la música clásica o ambiental.
- Asegúrate de que el volumen no sea demasiado alto para evitar distracciones.
- Usa audífonos para bloquear ruidos externos y maximizar el enfoque.
Estudiar con música puede transformar la manera en que abordas tus actividades diarias, optimizando tu concentración y creando un ambiente propicio para el aprendizaje.