La grandiosa actuación de Sam Smith en los Grammy la noche del domingo 5 de febrero llamó la atención de los conspiracionistas, quienes pensaron que al cantante se lo habían "llevado los demonios".
Sam Smith y Kim Petras se unieron para interpretar en vivo su colaboración "Unholy". En una actuación que contó con iluminación roja, pirotecnia y bailarines que actuaban en jaulas metálicas, mientras se veía a Smith con un sombrero con cuernos de diablo. De hecho, Madonna introdujo la actuación preguntando al público: "¿Están preparados para un poco de controversia?".
"Esto es lo que he aprendido tras cuatro décadas en la música. Si te llaman chocante, escandaloso, problemático, provocador o peligroso, definitivamente estás en algo", continuó diciendo la Reina del Pop.
Las críticas hacia la presentación
Fieles a la palabra de Madonna, conspiranoicos y comentaristas conservadores criticaron duramente la presentación. Uno de ellos incluso la calificó como el inicio de una "guerra espiritual".
El senador republicano estadounidense Ted Cruz, por su parte, retuiteó varios tuits en los que tachaba la actuación de satánica. "Esto es... maligno", comentó en el retweet de un tweet de la comentarista conservadora Liz Wheeler, en el que se escribió: "No luches en las guerras culturales, dicen. Mientras tanto los demonios están enseñando a tus hijos a adorar a Satanás. Podría vomitar".
"No es sorprendente ver un ritual satánico en los Grammy", añadió el bloguero de derecha Matt Walsh. "El satanismo es la adoración del yo. Gran parte de la música pop moderna es satánica en este sentido. El izquierdismo es satanismo. El único cambio es que ahora son más explícitos al respecto".
Smith y Petras ganaron el premio a la mejor actuación pop en dúo/grupo, convirtiendo a Petras en la primera mujer transgénero en conseguirlo. En su discurso de aceptación, rindió homenaje a la difunta DJ y productora SOPHIE, así como a Madonna y a su madre.