La iniciativa conocida como Made by Chileans, el programa de uso de la Marca Chile, continúa consolidándose como una de las herramientas más relevantes para proyectar la identidad nacional hacia el exterior.
Lo que comenzó como un esfuerzo por visibilizar productos chilenos hoy se ha transformado en una plataforma que integra empresas, emprendimientos, instituciones culturales e incluso territorios que buscan mostrar al mundo aquello que distingue a Chile.
La historia de Imagen de Chile
Creado en 2016 por la Fundación Imagen de Chile, el programa alcanzó recientemente los 3.310 licenciatarios, con presencia en más de 150 mercados internacionales. Del total de organizaciones participantes, un 68% corresponde a productos y un 32% a servicios. Estas cifras, a su vez, reflejan la diversidad del ecosistema que se ha sumado al uso del sello.
Quienes forman parte de Made by Chileans acceden gratuitamente a la licencia de Marca Chile, lo que les permite incorporar el distintivo nacional en diversos soportes de comunicación y promoción. El objetivo del programa es fortalecer la reputación, aumentar la competitividad y ampliar el alcance de las marcas, tanto dentro del país como en contextos internacionales.
Los hitos alcanzados
Durante los últimos meses, la iniciativa amplió su campo de acción para incluir también espacios y territorios vinculados a la cultura y el patrimonio. Algunos de los más recientes en sumarse son el Parque del Estrecho de Magallanes, el conjunto patrimonial Virginia Opazo, el primero de su tipo en integrar el sello, y la Corporación Cultural Semanas Musicales de Frutillar.
El impacto de Made by Chileans fue reconocido en noviembre. Esto, cuando obtuvo el primer lugar en la categoría Best Citizen Engagement de los City Nation Place Awards 2025 en Londres.
El galardón destacó la capacidad del programa para articular a actores de diversos sectores en torno a la construcción de la imagen país.
María Teresa Saldías Morales, directora ejecutiva de Imagen de Chile, valoró el alcance de la iniciativa. Afirmo que “más de 3.000 actores hayan confiado en este sello demuestra la fuerza de un programa nacido en Chile y observado desde el extranjero. Empresas, emprendedores y territorios han convertido Made By Chileans en una comunidad que refleja de manera auténtica quiénes somos”.
Un futuro resplandeciente
Actualmente, la mitad de los licenciatarios proviene de regiones, lo que evidencia el carácter descentralizado y diverso del proyecto. La postulación se realiza mediante una plataforma web simple, donde se evalúan aspectos como trayectoria, origen, impacto y aporte al posicionamiento internacional del país.
Víctor Palma, director de Alianzas Estratégicas de Imagen de Chile, enfatizó: “Esta es una invitación abierta a quienes creen en el valor de lo que nace aquí. Cada nuevo licenciatario no solo amplía el alcance del sello, sino que también suma una voz al relato colectivo de Chile”.
