El 12 de noviembre de 1988, U2 alcanzó un nuevo punto de inflexión en su carrera.
Ese día, la banda irlandesa llegó al número uno de las listas de álbumes en Estados Unidos con Rattle and Hum. Este proyecto se mantuvo seis semanas en la cima y superó los 14 millones de copias vendidas.
El álbum, concebido como complemento del documental del mismo nombre, muestra a la banda explorando la cultura musical estadounidense. Lo hace a través del blues, el gospel, el rock sureño y el folk.
Con esta obra, Bono, The Edge, Adam Clayton y Larry Mullen Jr. se propusieron rendir homenaje a las raíces del rock. Al mismo tiempo, buscaban expandir su sonido tras el éxito global de The Joshua Tree.
Producido por Jimmy Iovine, Rattle and Hum combinó grabaciones en vivo del Joshua Tree Tour con nuevas canciones de estudio registradas en los emblemáticos estudios A&M de Los Ángeles.
Entre los temas más destacados figuran Desire, All I Want Is You, Angel of Harlem y When Love Comes to Town, una colaboración con B. B. King que reafirmó la conexión del grupo con la tradición musical estadounidense.
Rattle and Hum: entre la devoción y la controversia
El disco nació con ambición. U2 decidió publicar un doble LP que reuniera 17 canciones, aunque dos temas originales, Hallelujah (Here She Comes) y A Room at the Heartbreak Hotel, quedaron fuera y se lanzaron como lados B de otros sencillos.
El resultado fue una obra expansiva que reflejaba tanto la fascinación del grupo por sus influencias como su deseo de reinventarse.
Sin embargo, la crítica de la época no fue unánime. Algunos periodistas consideraron que el álbum era una obra genuina y emotiva. En cambio, otros lo calificaron de pretencioso.
A pesar de la división, Rattle and Hum se convirtió en un fenómeno cultural y consolidó a U2 como una de las bandas más importantes del mundo.
Bono describió el proyecto como un intento de "buscar el alma de América", y en muchos sentidos lo consiguió: el disco transita entre la devoción y la rebeldía, entre la fe y el desencanto, temas que seguirían marcando su obra posterior.
El puente hacia una nueva etapa
Rattle and Hum cerró un ciclo creativo y abrió el camino hacia una transformación.
Tras su publicación, U2 dejó atrás el sonido épico y espiritual de los años 80 para dar paso a una faceta más experimental con Achtung Baby (1991), el álbum que redefinió su identidad artística.
