La icónica banda británica Radiohead protagonizó un regreso triunfal este martes 4 de noviembre en el Movistar Arena de Madrid. Marcando su primer concierto en vivo desde 2018.
Este reencuentro no sólo representa la vuelta de Thom Yorke, Jonny Greenwood, Ed O’Brien, Colin Greenwood y Phil Selway al escenario juntos. Sino también una lectura de su trayectoria musical que mezcla clásicos, sorpresas y una fidelidad emocional hacia su público.
Tras una pausa de siete años durante la cual el quinteto exploró proyectos paralelos, como The Smile (Yorke/Greenwood), discos en solitario y bandas sonoras, Radiohead decidió recomponerse para una gira europea que incluye 20 fechas en cinco ciudades.
La inauguración en Madrid, con entradas agotadas, se convirtió en una fiesta para fieles seguidores y nostálgicos del rock alternativo.
El setlist de Radiohead ofrece un recorrido cronológico por álbumes clave
se abrió con “Let Down” y siguió explorando desde los primeros discos hasta cortes más recientes, incluyendo “Paranoid Android”, “Karma Police”, “Idioteque” y otras piezas que demuestran cómo Radiohead no se limita a los éxitos, sino que construye una narrativa sonora profunda.
Según Colin Greenwood, el grupo seleccionó alrededor de 70 canciones y promete un enfoque de “busking”, una suerte de improvisación controlada, variando repertorio y orden, lo que garantiza que cada concierto será único.
En términos de impacto, el retorno de Radiohead funciona como prueba de que la relevancia artística no depende únicamente de nuevos lanzamientos, sino de la coherencia estética, la conexión emocional con la audiencia y la capacidad de reinventarse sin perder identidad.
Las canciones elegidas para este repliegue en vivo no sólo apelan al “gran hit”, sino al álbum, a la atmósfera, al matiz. Canciones como “Weird Fishes/Arpeggi” o “Nude” demuestran esa ambición.
Para el público chileno, latinoamericano y global, y dados los éxitos previos de la banda en la región, este regreso no solo rememora momentos como sus conciertos en Santiago, sino que abre la esperanza (aunque aún no confirmada) de nuevas fechas o extensión de la gira fuera de Europa.
En definitiva, el “nuevo” Radiohead que subió al escenario en Madrid es un Radiohead consciente de su legado. Pero también con ganas de jugar, sorprender y desplegar su universo sonoro en el presente.
Y aunque aún no hay anuncio de disco nuevo, esta gira funciona como manifiesto vivo. La banda sigue viva, relevante y con muchas historias por contar.
