Vince Gilligan venía rumiando la idea desde los inicios de "Better Call Saul". Imaginando mundos donde la solidaridad brota de golpe y la realidad se vuelve, de un día para otro, más amable.
Ese contraste con sus obras previas, marcadas por la ambición y la corrupción, explica por qué quiso crear un “héroe” distinto. Imperfecto, torpe y humano.
Su propósito, recuperar la sorpresa de la primera impresión y ofrecer a la audiencia una experiencia que llegue limpia, sin expectativas previas.
Vince Gilligan y el carácter hermético del proyecto
Gilligan mantuvo "Pluribus" en secreto durante años, ni siquiera se lo contó a su esposa, porque quería controlar la primera impresión y mostrarle a Rhea Seehorn un borrador sólido antes de divulgar la serie. Esa cautela explica la precisión con que se han cuidado tono y sorpresas, según consignó Hollywood Reporter.
Seehorn aceptó encarnar a Carol Sturka, una novelista de romances misántropa cuyos libros, la saga ficticia Los vientos de Wycaro, la han hecho famosa pero no feliz.
La actriz describe la serie como “perturbadora y muy graciosa”, y Gilligan trabajó la voz de Carol como la de una heroína dañada que, pese a su áspera humanidad, busca hacer lo correcto.
A nivel de producción, Gilligan reaccionó a otra lección de su trayectoria. La sobreexposición de localizaciones como Albuquerque.
Para evitar convertir un barrio real en destino turístico y proteger a vecinos, se construyó un vecindario ad hoc, ladrillo a ladrillo, y la serie ya arrancará con dos episodios disponibles el 7 de noviembre de 2025, seguida de una emisión semanal. Apple incluso garantizó una segunda temporada antes del estreno.
"Pluribus" promete entonces un cambio de ritmo. El autor que exploró la corrupción y la caída humana ahora escribe sobre la redención y la extraña fragilidad del bien.
Si Gilligan logra que la audiencia pierda cualquier spoiler previo, como él deseó, el estreno podría convertirse en la rara experiencia colectiva que devuelve el misterio a la televisión.
