La despedida definitiva de Ozzy Osbourne y Black Sabbath en el festival Back to the Beginning volvió a encender la conversación global luego de que Sharon Osbourne desmintiera la cifra que recorrió el mundo: no fueron 190 millones de dólares, sino 11 millones los recaudados para organizaciones benéficas.
La corrección, hecha en el primer episodio de The Osbournes Podcast tras la muerte de Ozzy en julio, pone en perspectiva el verdadero alcance del evento… y también la facilidad con que una cifra no verificada puede convertirse en titular mundial.
La confusión comenzó cuando Tom Morello, guitarrista de Rage Against the Machine y curador musical del festival, publicó en redes sociales que el show había reunido US$190 millones.
El dato fue replicado inmediatamente por medios de todo el mundo, alimentando la idea de un récord histórico en recaudación para un concierto benéfico.
Pero Sharon fue categórica: “Esa cifra es ridícula. Ojalá hubiera sido así, pero vivimos en el mundo real”. Al ser consultada por su hijo Jack, especificó que la cifra real fue US$11 millones, un monto significativo pero muy alejado del rumor viral. Además, detalló que el evento asumió todos los costos de traslado, alojamiento y producción para los artistas invitados.
Un gesto colectivo que trasciende la cifra
Más allá del número final, Sharon destacó un elemento que emocionó a la comunidad metalera: ninguno de los músicos cobró un centavo. Metallica, Guns N’ Roses, Slayer, Tool, Pantera y todas las leyendas convocadas dieron su tiempo y su trabajo de manera completamente gratuita para homenajear al “Príncipe de las Tinieblas” en su última aparición en vivo.
La recaudación beneficiará a tres instituciones. Cure Parkinson’s, el Birmingham Children’s Hospital y el Acorn Children’s Hospice, reforzando el espíritu solidario detrás de la despedida de uno de los íconos más influyentes en la historia del rock.
Ozzy Osbourne: un adiós con impacto emocional y digital
La muerte de Ozzy meses después del concierto amplificó la relevancia del evento. Todo los relacionado a Back to the Beginning y su recaudación se dispararon. Lo que explica cómo la cifra inflada de US$190 millones se propagó sin filtros. La emoción colectiva, sumada al legado de Ozzy, generó un terreno fértil para la desinformación involuntaria.
Sin embargo, la cifra oficial de US$11 millones no disminuye la magnitud del gesto. Un último show cargado de historia, emoción y solidaridad, que demostró que el metal también puede construir comunidad cuando más importa.
