Cinco décadas después de su primera colaboración, Stevie Nicks y Lindsey Buckingham sorprendieron a los fanáticos al reaparecer juntos -aunque en entrevistas separadas- en el podcast Song Exploder.
Ambos repasaron los orígenes de Frozen Love, la canción que cerró su álbum debut de 1973 y que marcó el inicio de una de las relaciones más intensas y creativas del rock.
La conversación coincidió con la reedición oficial del álbum Buckingham Nicks, disponible por primera vez desde su lanzamiento original.
Nicks reconoció que, pese a los años de distancia y tensiones, "Lindsey y yo empezamos a hablar de esto anoche. Todo esto se siente como si hubiera sido ayer".
Un amor que nació con la música
Nicks y Buckingham se conocieron en 1966, cuando ambos eran estudiantes en el norte de California.
Formaron parte del grupo Fritz, que llegó a telonear a Jimi Hendrix y Janis Joplin, antes de que el productor Keith Olsen los animara a seguir como dúo.
"Fue nuestra primera gran decepción en la música, pero también una invitación a la grandeza", recordó Nicks. "Nos impulsó a estar juntos, y entonces nos enamoramos. Y eso fue todo".
De ese vínculo nació Frozen Love, una pieza que Nicks describió como "una historia sobre dos personas que se amaban, con muchas diferencias, pero cuya relación parecía un regalo".
Comparó el tema con romances clásicos como Cumbres Borrascosas o Grandes Esperanzas: "Nadie ama las canciones felices, ni yo ni Lindsey".
Buckingham, por su parte, explicó cómo se complementaban creativamente: "Ella me daba ese centro hermoso, y yo lo transformaba musicalmente. No creo que ella deseara mi intervención en ese nivel, ni yo la suya en la producción. Pero entendíamos lo que cada uno aportaba".
Una conexión que sobrevivió a todo
Según recoge Consequence, Nicks admitió que su relación fue "difícil, pero fantástica", y que el trabajo conjunto justificaba los altibajos.
También aclaró una confusión sobre la letra del tema: la línea "Fate gave you me for a lover" ("El destino te dio a mí como amante") suele escucharse como "Hate gave you me…". “Suena como si dijera 'odio'. No es bueno. Lo siento, Lindsey. Lo llamaré más tarde", bromeó.
Aunque Buckingham Nicks no tuvo éxito comercial en su momento, Frozen Love cambió el destino de ambos.
Cuando Mick Fleetwood escuchó la canción en el estudio Sound City, decidió reclutarlos para Fleetwood Mac, banda que los llevaría al estrellato.
