David Gilmour no dejó espacio para la duda: nunca volverá a compartir escenario con Roger Waters.
En una nueva entrevista con The Telegraph, el guitarrista de Pink Floyd fue tajante al responder si algo podría hacerlo cambiar de opinión. "Nada. No hay forma posible de que lo haga", dijo, con lo que reafirmó una ruptura que se arrastra por décadas.
El conflicto entre ambos músicos comenzó en los años setenta, durante una lucha por el control creativo y la dirección de Pink Floyd.
La tensión alcanzó su punto más alto en 1985, cuando Waters abandonó el grupo y posteriormente inició una disputa legal sobre el uso del nombre de la banda. Aunque los fans soñaron con una reconciliación, Gilmour mantiene su decisión firme: el pasado no volverá.
Disputas políticas y personales que reavivan la distancia
La fractura entre los dos músicos no solo tiene raíces artísticas. En los últimos años, las diferencias políticas profundizaron el distanciamiento.
Gilmour y su esposa, la escritora Polly Samson, criticaron públicamente las declaraciones de Waters sobre la guerra entre Rusia y Ucrania y otras posturas que consideraron antisemitas.
En febrero de 2023, Samson escribió en X (antes Twitter) un duro mensaje dirigido a Waters: "Antisemita hasta la médula. También un apologista de Putin y un mentiroso, ladrón, hipócrita, evasor de impuestos, misógino y megalómano enfermo de envidia".
David Gilmour respaldó sus palabras con una breve pero contundente frase: "Cada palabra es demostrablemente cierta".
Samson explicó luego el motivo de su publicación: "Lo hice porque Pink Floyd es una banda bastante sin rostro. Dondequiera que iba, la gente podía pensar que yo estaba casada con el que decía esas cosas, y no era una buena sensación".
También agregó: “Si sabían que estabas casada con alguien de Pink Floyd, la mitad del tiempo te miraban raro. Era incómodo y solo quería dejar claro que esas no eran nuestras opiniones”.
Mientras tanto, Waters volvió a encender polémicas al atacar recientemente a Thom Yorke, líder de Radiohead, con quien mantiene viejas diferencias.
"Es un tipo tímido. Creo que es una compañía desagradable", dijo el exbajista de Pink Floyd, prolongando el tono confrontativo que lo ha caracterizado en los últimos años.
Sigue a Concierto.cl en Google Discover
Recibe nuestros contenidos directamente en tu feed.
Seguir en Google