El 25 de octubre de 1986, Bon Jovi alcanzó el número uno en Estados Unidos con Slippery When Wet, el disco que consolidó su carrera y definió el sonido del rock de los 80.
El álbum se transformó en un fenómeno mundial con éxitos como You Give Love a Bad Name, Livin’ on a Prayer y Wanted Dead or Alive.
El trabajo, producido por Bruce Fairbairn y grabado en los estudios Little Mountain de Vancouver, fue el primero de la banda en liderar el Billboard 200.
Permaneció ocho semanas en esa posición y se consagró como el álbum más vendido de 1987 en Estados Unidos.
Slippery When Wet: ventas millonarias y reconocimiento global
Slippery When Wet superó los 28 millones de copias vendidas en todo el mundo y obtuvo doce certificaciones de platino en Estados Unidos, además de reconocimientos en países como Canadá, Australia y Reino Unido.
En 2005, el álbum fue incluido en el libro 1001 discos que debes escuchar antes de morir y la revista Classic Rock lo posicionó entre los 10 mejores álbumes de rock de todos los tiempos.
La crítica lo considera un punto de inflexión que llevó al glam metal a la corriente principal, combinando la energía del hard rock con letras accesibles y coros masivos.
Los himnos que marcaron los 80
Dos de sus sencillos, You Give Love a Bad Name y Livin' on a Prayer, llegaron al número uno del Billboard Hot 100.
Este último se convirtió en el emblema definitivo de la banda gracias a su inconfundible efecto talk box, idea del guitarrista Richie Sambora.
El propio Jon Bon Jovi confesó que al principio no creía en el potencial de la canción, pero Sambora insistió en incluirla. Esa decisión fue clave para que se transformara en un himno generacional.
El tercer sencillo, Wanted Dead or Alive, alcanzó el séptimo puesto en el Hot 100 y se volvió otro clásico por su tono más introspectivo. Mientras tanto, Never Say Goodbye se consolidó como una de las baladas más recordadas del rock ochentero.
