Tom Morello, de Rage Against The Machine, ha recordado la última conversación que tuvo con Ozzy Osbourne. Esto, durante su concierto «Back To The Beginning».
El pionero del heavy metal Ozzy falleció en julio a los 76 años, solo unas semanas después de subir al escenario para su último concierto en vivo en el gran concierto final de Black Sabbath en Villa Park. El cual conto con Morello como «director musical» del evento. En esta nota, te contamos todos los detalles al respecto.
El recuerdo de Tom Morello con Ozzy Osbourne
Durante una reciente aparición en Rocklahoma, Morello reflexionó sobre el honor que le supone desempeñar este papel. Así como sobre su última interacción con el pionero del metal.
«Esta fue la última vez que vi a Ozzy», dijo. "El día ha terminado. Ha sido genial, la gente ha estado trabajando en el espectáculo durante mucho tiempo y todos nos abrazamos y lloramos. Así que vamos a la fiesta posterior y finalmente todo se calma".
«Estoy jugando al pinball con mi hijo. Alguien me da una palmada en el hombro, y yo estoy en medio de una partida con varias bolas, y le digo: "Déjame en paz". Y es Jack Osbourne, porque su papá quiere saludarme».
Dijo que terminó su juego y le dijeron que Ozzy quería decirle algo. «Yo pensé: "Dios mío"», continuó. «En primer lugar, Ozzy viene a la fiesta posterior, lo cual es una locura, ¿no? Así que pude darle un último beso en la cabeza, decirle que lo quería, darle las gracias por toda una vida dedicada a la música, y su respuesta fue: "¿Podrías buscar a Sharon? Quiero largarme de aquí"».
A continuación, habló de la importancia que tenía para él personalmente la música de Ozzy y explicó que había llamado a su primer hijo Rhoads Morello en honor a Randy Rhoads, el querido guitarrista de Ozzy en su etapa en solitario, a quien se rindió homenaje en el concierto «Back To The Beginning» con un vídeo tributo.
«Así que», continuó Morello, «no solo tengo una deuda musical y artística con esos chicos, sino también una deuda personal en mi vida. Por eso, cuando Ozzy y Sharon me pidieron que fuera el director musical y comisario de ese día, me lo tomé muy, muy en serio. La idea era convertirlo en el mejor día de la historia del heavy metal y creo que lo hicimos bastante bien».
