Sean Ono Lennon ofreció una visión íntima y compleja sobre los sentimientos que su padre, John Lennon, albergaba hacia su época en The Beatles.
En una entrevista transmitida por BBC Radio 6 Music con Chris Hawkins, Sean desmintió la idea de que su padre se había "desenamorado de la música", aclarando que su resentimiento estaba dirigido hacia un tipo específico de fama.
Durante la conversación, Hawkins recordó el concierto The One to One de 1972 en el Madison Square Garden, la única presentación completa que Lennon ofreció tras la separación de The Beatles.
El ex Beatle había comentado en su momento que "el concierto del Madison Square Garden fue la mejor música que disfruté tocando desde The Cavern o incluso Hamburgo".
Sean respondió a la pregunta sobre si John se había distanciado de la música con una perspectiva matizada: "Creo que hay un poco de mito sobre eso. No siento que se hubiera desenamorado de la música. Creo que se había desenamorado de un cierto tipo de fama".
La búsqueda de una nueva identidad y el rol de Yoko Ono
Sean Ono Lennon profundizó en el tema en la entrevista, explicando que John Lennon "se había desenamorado de tener que ser parte de una maquinaria, de una máquina pop".
A pesar de haber sido siempre "rebelde dentro de ese marco", el músico "resentía, ya sabes, tener que ser un Beatle en cierto modo. Creo que realmente quería seguir adelante con eso".
En este contexto de transición, la relación con su madre, Yoko Ono, se convirtió en el "catalizador para ello y el símbolo de ello en su mente".
Según Sean, John quería "seguir adelante y ser un artista radical y activista con, ya sabes, esta chica, Yoko, de quien se había enamorado". Lennon estaba buscando "una nueva forma de hacer las cosas".
Sin embargo, esta búsqueda no estuvo exenta de dificultades, como lo demostró el álbum que grabó con Yoko, Some Time in New York City, que no fue del agrado de todos.
Sean defendió el trabajo de su padre, señalando que las canciones son "realmente geniales", aunque "menos pulidas de lo que la gente estaba acostumbrada". A su juicio, el disco fue grabado "impulsiva y rápidamente" con un "espíritu de rock and roll. Era casi como un punk, un tipo de espíritu proto-punk".
Sean concluyó que, aunque John Lennon parecía estar adelantado a su tiempo, el fracaso comercial del disco, sumado a su fuerte mensaje político, fue un golpe duro: "Creo que cuando no se vendió, creo que fue difícil para ellos".
