Este viernes 8 de agosto se cumplen tres años desde el fallecimiento de Olivia Newton-John, la icónica artista que brilló en el cine, la música y el activismo. Con más de 100 millones de discos vendidos y cuatro premios Grammy, fue una de las cantantes más exitosas de todos los tiempos y la artista femenina australiana con mayores ventas en la historia.
Nacida en Cambridge, Inglaterra, el 26 de septiembre de 1948 y criada en Melbourne, Australia, comenzó su carrera artística a temprana edad formando el grupo Sol Four y actuando en televisión local. En 1971 lanzó su primer álbum, If Not For You, que incluyó éxitos como Banks of the Ohio.
El fenómeno Grease y su carrera musical
En 1978, Newton-John alcanzó fama mundial al protagonizar junto a John Travolta la película musical Grease. El filme se convirtió en el más taquillero de su género y su banda sonora sigue entre las más vendidas de la historia. Entre los temas más recordados están Hopelessly Devoted to You y los duetos con Travolta You're the One That I Want —uno de los singles más vendidos de todos los tiempos— y Summer Nights.
Su trayectoria musical incluyó cinco sencillos número uno en el Billboard Hot 100 y dos álbumes en el primer lugar del Billboard 200. Entre sus grandes éxitos se cuentan I Honestly Love You (Grammy a la Grabación del Año en 1974) y Physical (1981), el sencillo más exitoso de la década de 1980 en EE.UU., además de Magic, Let Me Be There y Xanadu.
Activismo y últimos años
En 1992, a Olivia se le diagnosticó cáncer de mama, lo que marcó el inicio de una intensa labor como activista. Fue portavoz de campañas de autoexamen y recaudó fondos para la creación del Olivia Newton-John Cancer and Wellness Centre en Melbourne. También apoyó causas medioambientales y participó en eventos benéficos como el Music for UNICEF en 1979.
En 2019, fue nombrada Dama del Imperio Británico en reconocimiento a su carrera y a su compromiso con la prevención y tratamiento del cáncer.
Olivia Newton-John falleció el 8 de agosto de 2022, a los 73 años, en su rancho de Santa Ynez, California. Sus cenizas se esparcieron en lugares que amaba, como Byron Bay en Australia y su hogar en California.
