Efemerides

Cómo Queen creó "Bohemian Rhapsody": una mirada al proceso de grabación

Un 24 de agosto de 1975, Queen inició la grabación de "Bohemian Rhapsody", la canción que revolucionaría la historia del rock.

Queen
Getty Images

Intentar descifrar la mente de un artista es casi imposible, y no hace falta ponerse a jugar a ser psicólogo por un día. Sin embargo, siempre sentimos un irresistible interés al escuchar o leer una letra que nos toca profundamente. Y nos surge la clásica pregunta: ¿Qué quiso transmitir el autor?.

Lo realmente poderoso de la música es cómo nos hace sentir, cómo nos permite hacerla nuestra. Que cada verso despierte emociones, ya sean intensamente positivas o dolorosas, es lo que da vida a la obra.

Quien busque pasar desapercibido jamás podrá comprender el legado de íconos como Freddie Mercury o bandas legendarias como Queen, que justo un 24 de agosto de 1975 comenzaban a grabar “Bohemian Rhapsody”. Una de sus canciones más emblemáticas y reconocidas mundialmente.

Analizar “Bohemian Rhapsody” no es tarea fácil. Basta con buscar su nombre en Google para descubrir la enorme cantidad de referencias y artículos que ha generado esta icónica canción a lo largo de la historia.

Con casi seis minutos de duración, la obra se erige como un verdadero monumento musical, comparable en grandeza al arte de figuras como Miguel Ángel o Rafael. Hoy, 45 años después de su creación, la legendaria canción de Queen sigue cautivando a quienes se sumergen en su complejo y fascinante primer acto. Consolidándose como un hito en la historia del rock.

Y sí, hablamos de “actos”. La primera idea que llevó a Freddie Mercury frente a su piano distaba mucho de convertirse en la versión definitiva que hoy conocemos. El proceso creativo lo llevó a explorar nuevas formas de composición, y finalmente decidió estructurar la canción en distintos segmentos o actos. Creando así un tema que marcaría el camino de su álbum "A Night At The Opera".

Un viaje al pasado con Brian May

Como recordó Brian May en una entrevista con la revista Q en 2008, este enfoque innovador reflejaba la ambición de Queen por romper esquemas y redefinir la música rock.

"Mercury llegó al estudio con un nombre provisional para un manojo de hojas para anotar mensajes telefónicos. Pegó varios papeles en el piano, se sentó y comenzó a golpear las teclas con fuerza. La canción estaba llena de cortes y nos explicó que ahí en medio, iba algo estilo ópera. Él había creado las armonías en su cabeza y estaba decidido a mezclar todas las ideas en una única y espectacular canción, que en un inicio se llamaría 'Real Life', y que hoy conocemos como 'Bohemian Rhapsody'", señaló May.

No debemos olvidar que, aunque resulte romántico imaginar que “Bohemian Rhapsody” nació de un momento de pura inspiración, la realidad durante las sesiones de grabación en la granja transformada en estudio por Charles Ward y los hermanos Kingsley era distinta. Freddie Mercury ya tenía gran parte del esqueleto musical completamente formado en su mente, según consignó Rock FM.

Sea como sea, lo innegable es que "Bohemian Rhapsody" se ha ganado un lugar entre las mejores canciones de la historia. Sin un estribillo tradicional que se pueda corear, la canción destaca por su audaz fusión.

Un inicio a capella, una emotiva balada, uno de los solos de guitarra más memorables del rock, un segmento de inspiración operística y un cierre de puro hard rock que desemboca en una coda perfecta. Seis secciones que conforman una obra maestra incomparable, que ha inspirado a numerosos artistas a realizar versiones y tributos, elevando aún más el legado de la pieza original.


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