El 4 de julio de 1987, Pet Shop Boys alcanzó el número uno en el Reino Unido con It's a Sin, uno de los sencillos más influyentes del dúo.
La canción, lanzada el 15 de junio de ese mismo año como adelanto del álbum Actually, mantuvo el primer lugar durante tres semanas y también logró destacarse en Estados Unidos, donde llegó al puesto 9 del Billboard Hot 100.
Compuesta por Neil Tennant y Chris Lowe, la canción se escribió inicialmente en 1982, grabada en una demo con el productor Bobby Orlando y, tras varios años de ajustes, finalmente producida por Stephen Hague para el segundo disco del grupo.
Con una duración de cinco minutos, se convirtió en uno de los sencillos más vendidos de 1987 en Europa, obteniendo certificaciones en Reino Unido, Finlandia, Suecia y España.
It's a Sin: una crítica al dogma desde el synthpop
It’s a Sin nació como una descarga emocional. Neil Tennant confesó que escribió la letra en tan solo 15 minutos, motivado por la rabia acumulada durante su paso por la escuela católica St Cuthbert's de Newcastle. "En la escuela me enseñaron cómo ser / puro de pensamiento, palabra y obra / no tuvieron mucho éxito", dice la canción.
Aunque Tennant pensó en un principio que el tema sería una "broma de campamento", la audiencia la tomó en serio, e incluso provocó un sermón del párroco de Newcastle. El final de la canción incluye una parte del Confiteor y sonidos grabados en la Catedral de Westminster, mientras que el video dirigido por Derek Jarman muestra un juicio inquisitorial, simbolismos religiosos y representaciones de los siete pecados capitales.
La producción se destacó por su carga dramática: sintetizadores como el Fairlight CMI, Emulator II y Yamaha DX7, junto a una cuenta regresiva de la NASA, campanas y sonidos de truenos, definieron un estilo que, con el tiempo, sería reconocido como una de las máximas expresiones del synthpop teatral.
Polémicas y legado
Durante su lanzamiento, el DJ británico Jonathan King acusó a la banda de plagiar Wild World de Cat Stevens. Pet Shop Boys lo demandó y ganó el caso, donando la compensación a organizaciones benéficas.
Desde su estreno, It’s a Sin se ha mantenido como una canción central en los conciertos del dúo. Es, junto a West End Girls, uno de los dos únicos temas interpretados en todos sus shows. En 2004, Pet Shop Boys presentó una nueva versión en vivo como parte de un ciclo benéfico en Londres.