
Después de 10 años de construcción, la Universidad de Chile inauguró la semana pasada su Gran Sala Sinfónica Nacional, con un concierto para quienes fue pensado el espacio: la Orquesta Sinfónica Nacional y el Coro Sinfónico de la casa de estudios.
En la instancia participó hasta el Presidente Gabriel Boric. Esto, porque esta gran sala es inédita en nuestro país, y al parecer, cambiará la manera de escuchar y hacer música sinfónica como la conocemos.
Por eso, la directora del Centro de Extensión Artística y Cultural de la Universidad de Chile, Dominique Thomann, conversó junto a Marco Silva y María Elena Dressel en Nada Es Tan Grave.
Gran Sala Sinfónica Nacional
Según explica Dominique Thomann, "esta sala está construida de manera que no necesita amplificación sonora, osea una sala con acústica natural. Todos los materiales están pensados para que no necesiten microfonía o amplificación". Esto es algo que "las personas que van pueden sentirlo directamente en el cuerpo".
Thomman destacó también que este espacio es importante porque "tenemos una misión del cuidado del patrimonio, especialmente con los elencos de la Orquesta Sinfónica Nacional, el Ballet Nacional Chileno, la Camerata Vocal y el Coro de la Universidad de Chile. Estos cuatro elencos realizan muchas actividades de mediación y educación para acercar nuevos públicos. En ese sentido se hacen muchas masterclass, charlas preconciertos, conversatorios y con este espacio se suman nuevas actividades".
Por otro lado, Thomman explicó que esta sala tiene una capacidad para 1.078 personas, siendo un buen número de asistentes a las diferentes actividades.