Varios actores alcanzaron la fama gracias a personajes que luego les generaron incomodidad, ya sea por el riesgo de quedar encasillados o por no estar conformes con el papel. Morgan Freeman es un claro ejemplo: se convirtió en una estrella consolidada en su etapa madura después de interpretar un rol que recibió fuertes críticas.
La relación complicada de Freeman con el papel de Hoke Colburn comenzó en 1987, cuando interpretó al atento chófer negro en la obra off-Broadway "Paseando a Miss Daisy". La historia, que abarca desde 1948 hasta 1973 en Atlanta, Georgia, sigue la evolución entre Colburn y Daisy Werthan, una anciana judía que al principio se resiste a tenerlo como chófer. Con el paso del tiempo, desarrollan una profunda amistad, y la exprofesora incluso le enseña a leer.
El drama de Hollywood
En 1988, la obra recibió el Premio Pulitzer de Drama, lo que aceleró su traslado al cine. La película, estrenada al año siguiente bajo la dirección de Bruce Beresford, contó con Jessica Tandy como Werthan. Morgan Freeman fue el único actor que retomó su papel teatral en la pantalla grande, y su actuación le valió una nominación al Oscar a Mejor Actor. Aunque no ganó, Tandy se llevó el premio a Mejor Actriz, y la película obtuvo también los galardones a Mejor Película, Mejor Director y Mejor Guion Adaptado.
En 2020, Freeman expresaba únicamente agradecimiento y afecto hacia la película, y compartió sus impresiones con The Hollywood Reporter. "Era una historia muy diferente, un enfoque muy distinto. Trata sobre la relación entre un hombre y una mujer a lo largo del tiempo. Me recuerda un poco a esas películas francesas sobre el amor. Era literalmente una historia de amor. Afirmo que fue uno de los mejores trabajos que he tenido en el cine".
No obstante, Freeman no siempre tuvo una opinión positiva sobre "Paseando a Miss Daisy". Incluso antes de que la película recibiera una abrumadora aceptación en los Oscar, él ya sentía ciertas dudas respecto a su participación en la obra teatral. En ese tiempo, varios críticos cuestionaron la producción por tratar el tema racial de manera superficial y repetitiva, presentando una visión simplista y poco realista que evitaba confrontar los verdaderos problemas. Algunos señalaron que idealizaba el Sur previo a los Derechos Civiles, resultaba paternalista hacia la audiencia negra y recurría al cliché del "salvador blanco", según consignó Far Out.
La crítica contra Freeman
Cuando la película se estrenó y se convirtió en un éxito, Freeman parecía haber reconciliado su relación con "Paseando a Miss Daisy". En una entrevista con The Guardian, reconoció que recibió muchas críticas, especialmente de Spike Lee, quien rechazaba la postura racial de la película y estaba molesto porque su filme "Haz lo que debas" perdió esa noche de los Oscar frente a "Paseando a Miss Daisy". Incluso en 2015, Lee seguía molesto y expresó: "Nadie habla de la maldita Paseando a Miss Daisy. Esa película no se enseña en las escuelas de cine de todo el mundo como sí se enseña Haz lo que debas".
En realidad, el principal problema de Freeman con "Paseando a Miss Daisy" no estaba relacionado con la polémica racial. Más bien, le molestaba que el personaje de Colburn lo encasillara como "un hombre negro, sabio, mayor y digno", lo que durante años limitó sus oportunidades para interpretar otros roles.
Sigue a Concierto.cl en Google Discover
Recibe nuestros contenidos directamente en tu feed.
Seguir en Google