Un día como hoy, en 1978, la banda sonora de Saturday Night Fever (Fiebre del Sábado por la Noche) comenzó una racha histórica de 24 semanas consecutivas en el primer lugar del Billboard en Estados Unidos.
Con temas icónicos como Stayin' Alive, How Deep Is Your Love y Night Fever, interpretados por los Bee Gees, el álbum no solo definió el sonido de la música disco, sino que también marcó un antes y un después en la industria musical.
Lanzado el 15 de noviembre de 1977, el disco acumuló ventas globales superiores a los 40 millones de copias, convirtiéndose en el segundo soundtrack más exitoso de la historia, detrás de El Guardaespaldas de Whitney Houston.
La conexión de los Bee Gees con el proyecto
A pesar de que los Bee Gees no estuvieron involucrados desde el inicio de la película, su participación fue clave para el éxito del proyecto.
Según John Travolta, protagonista del filme, "los Bee Gees ni siquiera estuvieron involucrados en la película al principio. Ellos solo llegaron al proceso de postproducción. Yo pasé mucho tiempo solo bailando Stevie Wonder y Boz Scaggs". Fue Robert Stigwood, productor de la banda sonora, quien los convocó para crear los temas principales.
El resultado fue una colección de canciones que definieron no solo la película, sino toda una generación.
En marzo de 1978, cinco de las diez canciones más populares del Billboard eran de los Bee Gees, y el soundtrack representó cerca del 2% de las ventas totales de la industria musical de ese año.
Más allá de los Bee Gees
Aunque los Bee Gees son el corazón del álbum, el soundtrack también incluye éxitos de otros grandes artistas de la época disco, como Disco Inferno de The Trammps, Boogie Shoes de KC and the Sunshine Band y Open Sesame de Kool & The Gang.
La influencia de Saturday Night Fever no se limitó a la música.
Su impacto se extendió a la moda, el cine y la cultura popular. El estilo de vestimenta inspirado en la película y los movimientos de baile asociados con la música disco se convirtieron en emblemas de los años 70.
Reconocimientos y legado
El éxito del álbum fue reconocido con premios como el Grammy al Mejor Álbum de Banda Sonora Original y múltiples menciones en rankings de los mejores discos de todos los tiempos.
En 2003, VH1 lo clasificó como el quincuagésimo mejor álbum de la historia, y en 2005, Channel 4 del Reino Unido lo ubicó en el puesto 80 de los 100 álbumes más grandes.