Un día como hoy, en 1969, The Beatles sorprendieron a los transeúntes de Savile Row, Londres, con un concierto improvisado en la azotea de Apple Corps.
Con la participación del pianista Billy Preston, el cuarteto de Liverpool interpretó cinco canciones: Get Back, Don't Let Me Down, I've Got a Feeling, One After 909 y Dig a Pony.
Un concierto inesperado
La idea del evento surgió de Paul McCartney, quien quería probar Get Back con un público en vivo.
Sin embargo, la presentación se convirtió en un hito inesperado, ya que resultó ser la última vez que los cuatro miembros tocaron juntos en directo.
A pesar de que no se anunció oficialmente, el espectáculo captó la atención de los londinenses, quienes se congregaron en las calles y azoteas cercanas para presenciar el momento.
No obstante, las quejas de los vecinos llevaron a la policía a intervenir y poner fin a la actuación después de poco más de 40 minutos.
The Beatles: el fin de una era
Este concierto marcó el cierre de la etapa en vivo de The Beatles, quienes no habían realizado una gira desde 1966.
Además, fue parte de las sesiones de grabación del álbum Let It Be y quedó registrado en el documental homónimo lanzado en 1970.
La banda, en ese entonces, atravesaba tensiones internas. John Lennon estaba cada vez más distanciado, mientras que George Harrison se sentía relegado.
La llegada de Billy Preston ayudó a mejorar el ambiente en las sesiones, pero no impidió la disolución del grupo un año después.
A pesar del caos y la intervención policial, el concierto en la azotea sigue siendo un referente en la historia de la música.
Su impacto quedó inmortalizado en grabaciones, documentales y en la memoria de los fanáticos, consolidándose como uno de los momentos más icónicos de la banda.