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'El Conde': Una sátira brillante de lengua afilada que retrata la inmortalidad de ciertos personajes

La nueva película de Pablo Larraín retrata gráficamente cómo hay personajes que se hacen inmortales, para bien o para mal, por su legado.

El Conde Es Una Satira Brillante
Getty Images

"Existen las bestias en el mundo", es parte del diálogo entre el personaje de Paula Luchsinger con la hija de Pinochet interpretada por Antonia Zegers.

La nueva película del director nacional Pablo Larraín es una sátira brillante y donde la lujuria, la codicia y la ambición son centrales. Personajes detestables y con los que cuesta empatizar. Las risas abundan, pero riéndose de los personajes y no con ellos. En ese sentido, el trabajo de Guillermo Calderón y Larraín en el guion es realmente impresionante.

El reparto del filme está compuesto por Jaime Vadell interpretando a Augusto Pinochet, Gloria Münchmeyer como Lucía Hiriart y Alfredo Castro personifica a Miguel Krassnoff, conocido como "El Ruso" ayudante de Pinochet y quien cometió múltiples crímenes de lesa humanidad en la dictadura.

El resto del reparto lo completan Amparo Noguera, Antonia Zegers, Diego Muñoz, Catalina Guerra y Marcial Tagle como los hijos de Pinochet. Por otro lado, Paula Luchsinger es la intrusa de la historia y quien mayor incidencia tiene con el drástico final.

El Conde: una sátira más que brillante

El guion de El Conde está muy bien construido. Pocos diálogos y muchas imágenes y escenas que dicen mucho. La ambientación fría y desértica suman un montón al relato.

"Somos dos bestias de la noche. A mí me gustaba matar y a usted robar", le dice Alfredo Castro a Vadell en una escena. En esta sátira, Pinochet es retratado como un hombre sin mucho interés en los político y no como un sádico asesino, sino como un ladrón, faceta de la que poco se habla en otras películas.

"Su simpleza mental es brillante. 'Mi padre robó menos que otro'", es uno de los parlamentos más inteligentes y mejor logrados entre Luchsinger y Tagle.

En definitiva, El Conde no busca cambiar la forma en la que estos personajes históricos son vistos. Por el contrario, trata de dejar claro que personajes como Pinochet o Margaret Thatcher jamás dejarán de estar vivos y en el inconsciente de las personas. Por esto mismo lo retrato como un vampiro, porque no importa cuánto tiempo pase, la figura de Pinochet siempre dejará una mancha en la historia chilena.

No te pierdas esta película que estará disponible desde este viernes 15 de septiembre en Netflix y ya ganó el premio a Mejor Guion en el famoso Festival de Cine de Venecia.


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