Ian Kevin Curtis fue un cantautor y músico inglés. Se hizo conocido por ser el cantante principal y escritor de la banda de post-punk Joy Division y grabó dos álbumes con el grupo: 'Unknown Pleasures' (1979) y 'Closer' (1980). Curtis era conocido por su voz baja, estilo de baile y composición típicamente llena de imágenes de desolación, vacío y alienación.
La muerte del cantante
Curtis sufría de epilepsia y depresión. El cantante, a sus 24 años en 1980, se quitó la vida en la víspera de la primera gira norteamericana de Joy Division y poco antes del lanzamiento de 'Closer'. Poco después de su muerte, los tres miembros supervivientes de la banda se reconstituyeron como New Order.
A pesar de que Curtis decidió acabar con su vida, la figura mítica del post-punk sigue más viva que nunca cuatro décadas después. Sobre su vida, se han hecho películas, documentales e incluso se han escrito libros.
Probablemente nunca sabremos qué llevó al músico a suicidarse. Sin embargo, existe todo un abanico de especulaciones: el peso de la depresión, de la enfermedad, de su crisis matrimonial, de la responsabilidad por su temprana paternidad, ode la perspectiva abrumadora de una gira por Estados Unidos. Sea cual sea, su música y persona dejó a sus fans y amigos marcados.
El impacto de la banda
Joy Division surgió de la confusión industrial de Manchester en el período '77/'78. Firmados con el naciente sello Factory se convierten, en dos o tres años, en una de las bandas más importantes del rock.
La banda atrajo a fanáticos devotos de todo el mundo, quienes estaban fascinados con el grupo post-punk. En vivo sus shows fueron sobrecogedores, con un impacto visual conmovedoramente sombrío y un vocalista hipnótico, Ian Curtis, cuya epilepsia provocó el final prematuro del espectáculo en más de una ocasión.
Incluso después de todo este tiempo, no es difícil imaginar el impacto del primer lanzamiento de Joy Division en un público desprevenido. La banda apareció justo en el peak comercial del punk, estas diez canciones eran tan intransigentes y tan diferentes de todo lo demás que una reacción instantánea, que podría haber sido totalmente positiva o totalmente negativa. Era inevitable.
Las mejores canciones de la banda son: 'Transmission', 'Love Will Tear Us Apart', 'Disorder', 'She's Lost Control' y 'Atrocity Exhibition'