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La élite rusa está planeando el asesinato de Vladimir Putin según la inteligencia ucraniana

La Dirección General de Inteligencia de Ucrania reveló que el plan consiste en acabar con su vida rápidamente mediante "envenenamiento, enfermedad repentina o cualquier otra "coincidencia"".

Vladimir Putin
Getty Images

Vladimir Putin podría estar viendo como "la muerte" se acerca a él, ya que una información filtrada indica que un "grupo de personas influyentes" de la élite rusa está formulando un plan para derrocar al dos veces presidente.

La Inteligencia del Ministerio de Defensa de Ucrania afirma haber interceptado información que indica que personas de dentro del Kremlin están tramando deshacerse del presidente lo antes posible, según The Mirror.

La Dirección General de Inteligencia de Ucrania reveló que el plan consiste en acabar con su vida rápidamente mediante "envenenamiento; enfermedad repentina o cualquier otra «coincidencia»".

Al parecer, la disidencia dentro de los funcionarios del Kremlin ha surgido tras las paralizantes sanciones mundiales, tanto políticas como comerciales.

Los servicios de inteligencia sugieren que las enormes pérdidas sufridas por las fuerzas chechenas en el norte de Ucrania pueden haber desencadenado el supuesto complot.

Alexander Bortnikov

El servicio de inteligencia ucraniano afirma que ya se ha elegido al sucesor de Putin, el director del FSB Alexander Bortnikov.

"Se sabe que Bortnikov y algunos otros representantes influyentes de la élite rusa están considerando varias opciones para apartar a Putin del poder", dijo la Dirección General de Inteligencia.

Según una publicación en Facebook de la Dirección General de Inteligencia de Ucrania, la razón oficial de la caída de Putin es su error de cálculo en la guerra contra Ucrania.

La agencia de seguridad interna de Rusia tomó el relevo del infame y brutal KGB tras el colapso de la Unión Soviética.

Bortnikov desempeña un papel fundamental en el mantenimiento del orden en la Rusia de Putin. Esto porque la agencia es responsable de todo: desde la lucha contra el terrorismo; la seguridad de las fronteras; el contraespionaje y hasta la vigilancia electrónica.

Bortnikov y Vladimir Putin se conocen desde los años 70, cuando ambos servían en el KGB de Leningrado, según The Guardian.

 

 

 


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