El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, mantenía a sus dos perros, pastores alemanes, en la Casa Blanca. Sin embargo, ambos tuvieron que ser devueltos a su residencia en Delaware, tras un incidente.
Major, uno de los perros de Joe Biden, mostró un agresivo comportamiento en el lugar e incluso mordió a unos de los miembros de seguridad de la Casa Blanca.
Este animal fue adoptado por el presidente en noviembre del 2018, desde un refugio de animales. Además, es el más joven de sus mascotas, por lo tanto tiene una actitud más juguetona y agitada que los demás canes.
Sobre el incidente, las fuentes solo lo calificaron como una mordedura, sin dar mayores detalles, ni el estado de salud del trabajador.
Por el momento, no se ha informado si los animales regresarán a la Casa Blanca. Pero, Biden desde un principio estuvo muy interesado en que sus mascotas se instalaran en el lugar. Solo una semana después de su investidura, ambos ya estaban en el lugar.
Incluso, hace algún tiempo el mandatario conversó con Kelly Clarkson en The Kelly Clarkson Show, donde habló de la importancia de sus perros: “He estado obsesionado con que nuestros perros se acomoden porque tenemos un perro viejo y tenemos un perro muy joven”.