Tras el ataque a la joven lesbiana Carolina Torres por parte de dos hermanos, desde el gobierno anunciaron el "perfeccionamiento" de la ley antidiscriminación, más conocida como “Zamudio".
Y si bien esta norma ha tenido un importante impacto mediático, desde el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual Movilh, acusan que, tal como está, es "un león sin dientes", ya que es “reactiva”, detalló el vocero de la agrupación, Óscar Rementería.
Por ejemplo, si alguien es amenazado insistentemente y hace una denuncia, “juez dice ‘bueno, tengo que esperar que le peguen’”.
Otro de los aspectos a mejorar es que “si tú presentas una denuncia por discriminación y no la compruebas, el juez puede poner una multa al denunciante de hasta 2 millones”.
En este escenario, “¿quién va a tener ganas de denunciar si te están amenazando con una multa?”, expuso, e indicó que en otros países, persona acusada de discriminar "tiene que demostrar que no lo hizo".
Adicionalmente, Rementería hizo un diagnóstico de nuestra sociedad: "Recordemos que Chile es un país profundamente machista", "racista" porque "empezaron a llegar los inmigrantes haitianos y afloró el racismo", y además "clasista", como se ha podido apreciar en los últimos casos donde algunos sacan en cara su profesión.
"Machismo y homofobia también es parte de nuestra tradición cultural”, complementó.
Independiente de estas características, el vocero del Movil valoró que "gran mayoría de personas que han utilizado la ley Zamudio, ha sido por discapacidad. No por diversidad sexual". Por tanto, la norma "es transversal en su uso".
“Ley es bastante amplia en términos de qué es un grupo vulnerable", rescató.
Finalmente, se refirió a la condición en que se encuentra Carolina Torres: "Ha ido evolucionando positivamente", aunque "médicos todavía no pueden decir si va a tener secuelas o no. Pero si las tiene, van a ser mínimas".
