Una compleja situación está viviendo el joven mapuche Brandon Hernández Huentecol. Por un lado, el carabinero que le disparó alrededor de 100 perdigones cumplirá su sentencia en libertad vigilada.
El exsargento Christian Rivera enfrentará una pena de 3 años y 541 días por lesiones graves y vejación injusta, por hechos ocurridos en diciembre de 2016. Brandon tenía 17 años.
Por otro, su situación médica es delicada justamente por los balines que quedaron dentro de su cuerpo y que obligan a un tratamiento en el extranjero. Ada Huentecol entregó su duro testimonio en #SeraOtroDia.
Respecto del día de la agresión, explicó que "mis hijos Brandon e Isaías estaban en la casa" en 2016, y ese día los carabineros "habían reducido a unas personas mapuche" en las cercanías.
"Isaías (de 13 años) decide salir a andar en bicicleta", y como usaba un "polerón con gorro", un carabinero "con una pistola en la cabeza amenazó a mi hijo con dispararle".
Christian Rivera "andaba trayendo perdigones de acero, con una tremenda escopeta" con la que estaba "siempre apuntándole a mi hijo". Fue entonces cuando llega Brandon para intentar ayudar a su hermano.
El exsargento "le dispara sin ningún motivo, fue por la espalda", explicó Ada Huentecol. "Mi hijo recibió 180 perdigones", principalmente en la cadera. Actualmente, "tiene 80 perdigones en su cuerpo".
"Disparo le molió la pelvis", por lo que ahora "él cojea", detalló. Con esta suma de antecedentes, "lo hemos dicho siempre, esto fue un homicidio frustrado". Estima que Rivera "debió retirarse de la situación, viendo que eran menores de edad".
"Mi hijo se estaba desangrando fuera de la casa. 5 minutos más y se moría", expuso sobre el día de los hechos.
Condición médica
"Hay uno (de los perdigones) que se le corrió al pulmón y eso le está trayendo consecuencias" a Brandon, indicó su madre. "Tenemos que pasar al menos una vez al mes en urgencias" por consecuencias del ataque.
Y si bien se ha sometido a tratamientos constantes en la clínica Alemana en Temuco, lo cierto es que ya más no se puede hacer. En este escenario, ven como mejor opción llevarlo a Cuba. Sin embargo, "no le van a retirar todos los perdigones, pero quisiera que le retiraran el que le está trayendo dificultades, que es en el pulmón", dijo afligida la mujer.
Aseveró además que internarlo en EEUU "es mucho más caro", por lo que tuvieron que descartar esa alternativa. La operación en Cuba tiene un costo de "alrededor de $7 millones".
Conviviendo con el terror
Tras conocer el fallo, Ada Huentecol se mostró desilusionada: "Esperaba que existiera alguna justicia, pero ahora ellos (mis hijos) están intranquilos, igual que yo" con libertad vigilada de exsargento Christian Rivera.
"Estamos invadidos de fuerzas represivas" en buena parte de La Araucanía, aseguró, lo que la llevó a referirse al caso de Camilo Catrillanca. "Yo entiendo muy bien a la mamá de Camilo donde ella ya no puede ver a su hijo (…) Nunca vamos a soportar el terror de enterrar a nuestros hijos".
"Yo ahora me siento insegura de que mis hijos puedan salir al campo y no sé si van a llegar vivos o muertos".
¿Estos casos son resultado de una discriminación contra los mapuche? “Para nada. He visto gente humilde que no son mapuche y aún sus casos son impunes. He visto muchos que han sido impunes y los culpables aún siguen libres. Yo creo que tiene más que ver con la pobreza”.
